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miércoles, 30 de julio de 2008

Vacaciones.

Llegó el ansiado momento de dejar atrás obligaciones y relajarse. De momento serán 15días cerca del mar, en Chiclana.

Descansar. Esa es la consigna.

Nos vemos a la vuelta.

lunes, 21 de julio de 2008

Llegó el déficit.

No es la primera vez que llega, claro que no, ni será la última. Pero esta vez llega en mal momento. Nadie le había llamado, y, es más, nos habían dicho que no se le esperaba por aquí.

Hay que tener en cuenta que 2.007 cerró con un superávit histórico, así que la caida, en sólo 6 meses, ha sido monumental. Más bien debería decir catastrófica.

Como decía, no se le esperaba, pero aquí está. Por primera vez en 3 años cerramos mes con déficit en nuestro PIB. Algo más del 0,4 % del PIB.

Y esto lo conocemos cuando Rodríguez & Co. alcazan el día 100 de esta legislatura. Me pregunto si el Gobierno por un lado y Blanco por otro seguirán machacando a quien se le ocurra decir que vamos mal. Me pregunto si el capitán Rodríguez ahora nos va a decir que el pesimismo no reduce el déficit y que el barco va de maravilla. José Luis hijo, el Titanic también iba de maravilla y mira cómo acabó Leonardo di Caprio.

Me pregunto si de una vez por todas dejarán de marear la perdiz y harán algo efectivo. Ya la han cagado con los 400 euros de marras, que a día de hoy no sé para qué sirve, si no es para gastar por gastar. Ah espera, claro, que había elecciones...

domingo, 13 de julio de 2008

Otra para la colección.

Hace algunas semanas ya avisé de que iba a empezar a recopilar memeces que encuentro en blogs, foros o conversaciones de gente de la izquierda. No quiero decir que la gente de derechas no caiga en iguales situaciones, que también, pero no me apetece, por el momento, recogerlas. Y como es mi blog, pues puedo permitirme el lujo de hablar de lo que me apetece.

Esta de hoy es para nota. Encontré un blog de una “activista” que encontraba a menudo en blogs de derechas, en la que se despachaba a gusto, aún a riesgo de reiterarse en posturas ridículas y carentes de sentido común.

No pondré el enlace porque tampoco es plan de que el personal se cebe, pero de verdad que esto que cuento es verídico.

Se trataba un tema algo manido: el uso de las banderas sólo por un sector de la sociedad. Pensaba que con la Eurocopa estaba esto ya más que superado, pero no, persisten en sus complejos. Lo cierto es que dio para mucho, incluso se desvió el tema en los comentarios hacia la Iglesia (cómo no). Se le empezó a culpar de casi todo (aún estoy esperando que alguien le culpe de lo del Titanic).

Alguien defendía a la Iglesia, alegando la gran verdad de que a ella debemos el conocimiento que hoy tenemos, puesto que durante siglos fue la única que fue capaz de mantener y desarrollar los conocimientos gracias a los cuales estamos hoy donde estamos.

El individuo del que hoy quiero hablar admitía esto. Pero ojo: Argumentaba que la Iglesia lo hacía sólo para satisfacer sus propias necesidades y ambiciones. Decía que, por ejemplo, todo el mundo sabe que la fotografía surge en el siglo XIX, pero que la Iglesia ya la conocía y usaba en el siglo XIV, y con el fin de inventar reliquias como la Sábana Santa. O sea, que la Iglesia ya tenía cámaras en el siglo XIV, y las usaron para hacer una especie de foto falsa y hacernos creer que la Sábana Santa era una reliquia.

Y este chico, ¿se cree esto que cuenta? ¿A que esta supera las anteriores que os he contado?

jueves, 10 de julio de 2008

Nuevo blog: Cómo suena el rincón desordenado

Hace tiempo ya tenía en mente abrir un segundo blog, y de temática musical.

Con esto de la jornada continua me he atrevido, al tener las tardes libres la inventiva tiene para sí más tiempo.

Y así he creado "Cómo suena el rincón desordenado".

Iré colgando canciones, o vídeos, de los que me gustan. Presentes y pasados, conocidos y no conocidos.

Aquí tenéis el blog.

martes, 8 de julio de 2008

Montegordo.

Siguiendo con la costumbre de contar algo de cada uno de los viajecillos que vengo realizando, el fin de semana pasado estuvimos en Montegordo, junto a Vila Real de Santo Antonio. Algarve portugués.

Ya el año pasado probamos el Algarve, y ciertamente es un muy buen sitio para veranear. Montegordo es un pequeño pueblo repleto de hoteles y pisos de verano. Imagino que en invierno no habrá ni un alma. Nuestra llegada fue algo accidentada, pensábamos pasar un fin de semana de descanso, y al llegar al hotel vimos niños, niños, niños y más niños. No había visto tantos niños juntos en mi vida. Al parecer había un campeonato de fútbol de niños, y según rezaban los carteles, participaban 15.000 niños. Claro, no había hotel que no sufriera tal invasión. La desazón se fue disipando cuando supimos que ése era el último día del campeonato. Y lo cierto es que a medida que pasaban las horas sabatinas iban desapareciendo los crianças (en Portugal no parece que haya problema del tipo crianças y crianços).

Habíamos elegido Pensión Completa, así que no puedo contar demasiado de restaurantes. El Hotel, el Praia Montegordo, es interesante tenerlo en cuenta. Buenísimas instalaciones, habitaciones tipo suite, limpias, amplias. Tal vez el único pero es que el restaurante tal vez debiera plantearse una mejora. La comida estaba bastante buena, pero quizás no a la altura del resto del hotel (me refiero a variedad y a tipos de platos).

La playa bien, aunque prefiero las que se van acercando al Cabo de San Vicente, más amplias y con menos gente. Tal vez la mañana del domingo demasiado masificada, aunque es de justicia decir que coincidió con marea alta. Eso sí, el agua era soportable, no como si nos acercamos al Cabo, cada vez más gélida.

martes, 1 de julio de 2008

Dos años.


Ayer se cumplieron 2 años. Nuestros dos primeros años de casados. 731 días de matrimonio (hay un año bisiesto), en los que día a día he ido descubriendo qué grande puede ser el amor, qué grande puede llegar a ser el compromiso sagrado que asumimos ante Dios hace ahora 2 años.

Es bonito, también, recordar ahora cómo fue ese día, cada detalle, cada momento. Aprovechamos para revisionar el video de la boda, y nos damos cuenta de qué gran momento, con cuántos detalles, vivimos ese 30 de junio. Fue un día que incluso el verano quiso dar una tregua, desde luego no hizo el calor que este año sí nos ha acompañado.

En dos años ha habido tiempo de casi todo lo que pueda surgir, malos, regulares y buenos momentos; entendimientos mejores y peores. Pero siempre un denominador común, comprensión.

Recuerdo que el sacerdote que nos casó, que también nos impartió los cursillos prematrimoniales, insistió en que basásemos el matrimonio en tres palabras: “por favor”, “gracias” y “perdón”. Respeto, agradecimiento y perdón.

Dar una dimensión sobrenatural al matrimonio es, sin duda, un elemento importantísimo en nuestro día a día. No es un contrato civil, es una unión indisoluble ante Dios. Fuimos los ministros del sacramento, dijimos “sí” como ministros, no como meros asistentes. Éramos los protagonistas, y seguimos siéndolo, de una historia inmejorable, de una historia que se me antoja cercana a la perfección. Al menos yo no imagino una vida mejor que la que llevo al lado de mi mujer, la que me da todo; en la salud y en la enfermedad, en la prosperidad y en la adversidad, en lo bueno y en lo malo; y me lo viene dando todos los días de su vida. Por supuesto, es mi meta dar lo mismo que recibo.

Han pasado dos años y todo lo que sentíamos ese día ha crecido, todo lo hemos ido cuidando con mimo para que ahora podamos presumir de un hogar lleno de amor, comprensión, y unión. Tal vez el próximo año podamos hablar de algo más… eso sólo Dios lo sabe.